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Fixture Superliga 2017/8

El Monumental - Paso a Paso

El primer campo de juego, a principios del siglo pasado, fue el de las Carboneras Wilson en el barrio de la Boca (el que usaba La Rosales) ubicado al este de la Dársena Sur, en la manzana limitada por la Av. Pedro de Mendoza y las calles Industria (Aristóbulo del Valle), Caboto y Alegría (Wenceslao Villafañe).


Este terreno lo pudieron obtener gracias a la ayuda del ingles Alberto Jacobs, el administrador de las Carboneras que les facilitó el pago del estampillado que exigía el Ministerio de Hacienda de 1,50 de la moneda de la epoca. En esta cancha actuó hasta 1906, año en que el Ministerio de Agricultura les ordenó el desalojo.

Maqueta de la cancha Darsena Sur

Alli juega su primer partido oficial ante Facultad de Medicina el 30 de abril de 1905 por la Tercera División.

A causa del desalojo, River Plate se tuvo que mudar a Sarandi , a un terreno cedido por José Bernasconi, director general de la empresa naval Dresco.

Ese predio pertenecía quedaba en la localidad de Sarandí, cerca del arroyo y de la estación de Ferrocarril Sud. Allí se mantuvieron tan solo un año, ya que llegar hasta ese lugar era complicado y se fueron perdiendo muchos hinchas.

La dificultad para tener agua y la lejanía hizo que solo el año 1907 River Plate utilizara esta cancha.

Al año siguiente volvió al barrio de La Boca, otra vez a la Darsena Sur pero esta vez al lado Oeste ubicado en Av. Pedro de Mendoza y Alegría (Wenceslao Villafañe). Jugando allí, River Plate ascendió en 1908 a Primera División y lo hizo hasta el año 1913.

River crecía día a día, como ejemplo de ello en el año 1908 entre dirigentes, jugadores y socias se llegaba a 100 personas y en el año 1911 los asociados llegaban a 4000.

El 13 de marzo de 1913 un terrible temporal en la ciudad de Buenos Aires arrasa con las instalaciones, inclusive una pequeña tribuna. Todo quedo esparcido por los alrededores de la rivera: los tablones, postes y carteles. De a poco se fue levantando nuevamente el field incluso una pequeña tribuna.

Pero a fines del año 1913 el jefe del Movimiento del Puerto de Buenos Aires de apellido Hardoy impartió la orden de desalojo.

Una anécdota que refleja lo difícil de la situación del momento, un grupo de directivos y simpatizante reunidos en la confitería La Camelia tuvieron la idea de provocar un incendio en las instalaciones para poder cobrar el seguro y asi efectuar la mudanza hacia un nuevo lugar. Para ello marcharon con una vela y diarios viejos para provocar el incendio. Pero nada sucedió dado que la sudestada apago la vela y por la noche cuando se lo contaron al tesorero la mala suerte de no haber podido concretar el plan, este casi se desmaya: “Que suerte que el incendio no se produjo, porque el encargado de renovar la póliza se olvido de hacerlo y estamos sin cobertura, lo hubiésemos perdido todo”.

Esto obliga a alquilar la cancha de Ferro Carril Oeste en Caballito para poder jugar de local el torneo de primera división.

A fines del año 1914 se alquila la esquina de Aristóbulo del Valle y Gaboto donde permanece hasta el año 1923. Esto estaba en la zona Centro de la Dársena Sur.

Se inaugura el 18 de abril de 1915 con una victoria por 5 a 0 contra Gimnasia y Esgrima Bs AS.

En su inicio el campo no poseía alambrado olímpico por lo que el árbitro debía esforzarse para que la gente no ingrese al campo de juego. Con el paso del tiempo, al crecer la popularidad, se construyo la tribuna techada.




Luego construye un salón para secretaria, un buffet y en una de las cabeceras (hacia calle Gaboto) el arquitecto Messina realiza una grada de 74 metros de largo por 7 metros de alto con 18 escalones y sobre calle Pinzón era de 120m metros de largo con 4 escalones, esto permite superar todos los records de recaudaciones de la época.

En el año 1921 el por entonces presidente de River Plate, el Dr. Jose Bacigalippi trabajaba como rematador y por ende conocía el valor de los terrenos en la ciudad de Buenos Aires.

En esa época el crecimiento de River era constante y cualquier decisión desacertada que se tomara podría afectar el mismo.

Fue él quien se encargó de elegir entonces el nuevo predio para el campo de deportes siendo el elegido el antiguo predio del campo deportivo de la Escuela Nacional Sección Oeste y del Ferrocarril al Pacífico (hoy San Martín), en la manzana delimitada por la Av. Alvear (Av. del Libertador), la calle Austria, la Av. Centenario (Figueroa Alcorta) y la calle Tagle (dónde actualmente se levanta la Plaza República Oriental del Uruguay). Ese lugar, que se encontraba en Recoleta y muy cerca de Barrio Parque, era una de las zonas más aristocráticas de Buenos Aires, lo completamente opuesto al barrio de La Boca.



Vista aérea con la cancha desmontada (1939). Nótese la tribuna y la pileta de natación sobre la calle Austria (pues ese tramo de la foto data de 1937).


Estos terrenos en La Recoleta habían pertenecido a Juan Manuel de Rosas en el siglo anterior, y curiosamente, entre 1905 y 1906, el Club Atlético Independiente alquiló el terreno de la esquina de Alvear y Tagle, que pertenecía a la Escuela Nacional Sección Oeste por solo $10 al mes.

El Dr. Bacigaluppi planteó su deseo ante la comisión directiva, que en un primer momento lo trató de loco. Sin embargo, siguió adelante, averiguando que los terrenos pertenecían al Ferrocarril al Pacífico y comenzando las tratativas de alquiler por su cuenta. Luego de tres días, consiguió para el club de La Boca un arrendamiento por cinco años con opción por cinco más. No todo fue fácil: algunas fracciones del predio estaban afectadas por una ley de expropiación y además el intendente Carlos Noël obligó a que la parte del futuro estadio que iba a dar a Av. Alvear respetara el estilo de la zona.

El encargado de hacer el plano fue el arquitecto Bernardo Messina quien proyectó entonces una fachada de columnas sobre Av. Alvear.






Vista general de la ubicación del estadio de Alvear y Tagle (cerca del año 1925).






Vista de los alrededores del estadio. Av. Centenario y Ocampo (cerca 1925).






Vista aérea desde Puerto Nuevo en construcción (cerca 1927).




Allí construyó un estadio que contaba con dos grandes tribunas longitudinales en el sentido de las avenidas Alvear y Centenario, y dos cabeceras pequeñas sobre las calles Tagle y Austria.



Construcción de la tribuna oficial sobre Av. Alvear (cerca 1923).




La tribuna oficial (Av. Alvear) tenía 38 escalones y 120 metros de largo. La tribuna popular opuesta (Av. Centenario) tenía 28 escalones y el mismo largo. Debajo de las tribunas se construyeron vestuarios para locales y visitantes, buffet, sala de primeros auxilios, secretaría, salón de fiestas, peluquería, vestuarios para socios y guardarropas. Sobre las cabeceras se levantaron rampas de tierra, una de ellas escalonada, que más tarde fueron reemplazadas por tribunas.



Construcción de la tribuna oficial sobre Av. Alvear (circa 1923).




El estadio de Av. Alvear y Tagle fue una de las grandes canchas del fútbol argentino. Llegó a tener una capacidad de 58.000 personas lo que lo convirtió al momento de su inauguración en el más grande del país, superando ampliamente al de Sportivo Barracas. Su construcción comenzó en 1922, habilitándose el 20 de mayo de 1923 en un partido amistoso entre River (2) y Peñarol (1) de Montevideo.

Sobre las cabeceras fueron construidos dos taludes y debajo los vestuarios. Además contaba con una sala de primeros auxilios, una secretaría, un vestuario para socios, un guardarropa, una confitería, un salón de fiestas y una peluquería.


Nota: La identidad barrial de River es casi nula y esto tiene que ver con su mudanza a La Recoleta, situación que le produjo un gran aumento de socios, de una extracción social diferente a la que tenía hasta ese momento y lo posicionó como un club de envergadura. El optar por el traslado dejó su lugar original en manos de Boca Juniors, su rival de turno, que se quedaría en el barrio.



Vista general (1926)




Vista general cerca 1926
En 1928, el club ya está afiliado a ocho federaciones para que sus socios puedan competir en futbol, basquetbol, tenis, boxeo, atletismo, balón, ciclismo y bochas. Lo que provocaría que al año siguiente, 1929, se transforme en uno de los más significativos desde el punto de vista social, porque el club pasa de 7521 asociados registrados en el inicio de la temporada a 15.466.

Vista aérea parcial (agosto de 1928). Fuente: Caras y Caretas.




Pileta de natación sobre la calle Austria (1930).



Pileta de natación sobre la calle Austria (1930). Nótese la tribuna cabecera a la derecha.





Canchas de tenis sobre la Av. Alvear (1930).

Volviendo al futbol:
Último partido (amateur): 29 de marzo de 1931. River Plate 0 - Lanús 0.

Primer partido (profesional): 4 de julio de 1931. River Plate 2 - Estudiantes de La Plata 1.

Maqueta del estadio de Alvear y Tagle en el museo de River Plate (2014).

En este estadio River Plate no obtuvo torneos en la etapa amateur.En la era profesional.
River Plate obtuvo en este estadio los títulos de 1932, 1936 y 1937. Con la llegada del profesionalismo en 1931, River Plate adquirió en $ 10.000 el pase del jugador Carlos Peucelle de Sportivo Buenos Aires. Esto le valió el mote de "Los Millonarios". Al año siguiente reafirmó la tendencia, al comprar en $ 35.000 al goleador de Tigre, Bernabé Ferreyra.


Los terrenos en los que se levantaba el estadio no eran propiedad de River Plate. El contrato firmado con el Ferrocarril del Pacífico en 1922 era de cinco años con opción a cinco más, con un alquiler de $ 500 por mes. En 1927 el contrato fue por sólo seis meses con opción a otros seis, situación que se mantuvo hasta 1931. En 1932 se firmó un contrato por 3 años con un alquiler de $ 2.000 por mes. En 1935 River firmó el último convenio por 2 años, con un alquiler de $ 3.530 por mes.

El partido despedida de Alvear y Tagle se jugó en la última fecha del campeonato de 1937.

Último partido: 5 de diciembre de 1937. River Plate 6 - San Lorenzo 1.


Vista aérea del centro de la ciudad de Buenos Aires (1937).


La siguiente foto, tomada en 1939, muestra el predio de Alvear y Tagle, un año después de que se desmantelaran el estadio y las instalaciones del club. Parte de las viejas tribunas fueron instaladas en el estadio que entre 1940 y 1949 tuvo el club Almagro en las calles Fraga y Estomba en el barrio de Villa Ortúzar.

Predio de Alvear y Tagle (1939).


El 31 de octubre de 1934 el entonces presidente de River Plate Antonio Vespucio Liberti firma los papeles para la compra de un terreno de 5 hectáreas en el Barrio de Belgrano, más precisamente en Nuñez con la idea de construir el nuevo campo de deportes.

Esos terrenos habían sido ocupados por el Hipódromo Nacional y a la firma del boleto de Compra-Venta costaron $ 569.403 de la moneda de aquella época, los terrenos en cuestión a un valor de 11 pesos el metro cuadrado. River compró alrededor de 5 hectáreas y la Municipalidad de Buenos Aires donó otras 3,5 hectáreas que son en definitiva las 8,5 que el CARP posee en la actualidad.

Según cuentan los memoriosos e historiadores, el presidente fue a inspeccionar los terrenos que eran conocidos como “La Siberia” junto a otros dirigentes y uno de ellos le dijo: “Mire Don Antonio, esto terrenos solo sirven para esto”, y se puso a orinar.





Foto de los terrenos denominados "La Siberia"

En la mañana del 25 de mayo de 1935 se coloca la piedra fundamental con la presencia del Presidente en ejerció A. V. Liberti, el ex titular José Bacigaluppi, integrantes de la comisión directiva completa, autoridades nacionales y municipales y público en general.
El 1 de diciembre de ese año la Comisión Directiva presentó a los socios, en una Asamblea Extraordinaria, los planos aprobados y la reseña detallada de las obras a realizar. Se obtuvo un préstamo de $2.500.000 pesos del Banco Hipotecario Nacional ya que la idea de construir un estadio que pudiese ser considerado como el escenario nacional pero que estuviese manejado por un club como River Plate en lugar de estar en manos del estado, sedujo a los gobernantes que inmediatamente dieron el visto bueno.

No obstante los malos augurios el 27 de setiembre de 1936: Se inicia la construcción del estadio “Monumental”, monseñor Napal bendice los cimientos del futuro gran estadio.


Momento historico: se coloca la piedra fundamental.

En 1934 el club llamó a concurso nacional de anteproyectos para la construcción del Monumental. La idea era simple: edificar estadio con pista de atletismo, completamente construido en hormigón armado, con instalaciones deportivas anexas tanto en el interior como el exterior del mismo y que contemplara la posibilidad de llegar a una súper capacidad de 120.000 espectadores. En aquella época los juegos olímpicos eran mucho más populares que los mundiales de fútbol; De allí la necesidad de incorporar una pista de 400 metros alrededor del campo con la esperanza de poder albergar dicha competencia internacional. Algo que nunca ocurriría.Se formó una comisión especial, integrada por reconocidos profesionales (los ingenieros Mario Negri, Alberto Chiappe, Luis Delle Piane y Carlos Duran ti; los arquitectos Héctor Peña, Enrique Creen, Antonio Ventafridda y Ernesto Fava) que se dedicaron a la tarea de estudiar paso a paso los aspectos técnicos de la construcción.
La obra fue dirigida por los arquitectos José Aslan y Héctor Ezcurra, con la ayuda del dibujante Fidias Calabria, lo que significó una marca de por vida en la historia de este afamado estudio de arquitectura, tenía un costo inicial de $ 4.479.545,80, pero luego se redujo a 3 millones, cuando se resolvió no construir la tribuna Norte (Sivori). Las tres tribunas se levantaron en dos años.

Maqueta de la Empresa Construcciones Sudamericanas



Maqueta del futuro estadio

Un rasgo característico de la construcción fue que se optó por la fundación directa, a seis u ocho metros de profundidad, con excavación a cielo abierto, por permitirlo la estabilidad del terreno, y con achique por bombeo del agua que hacía irrupción.
Se ejecutaron 50 km de gradas, con 26.000 m² de hormigón y una armadura de casi 3.000 t de acero.
Pocos años después, cuando estaba en curso la Segunda Guerra Mundial, el acero utilizado hubiera costado más de lo que costó todo el estadio.
Cuando el estadio comenzó a construirse en el actual barrio River solo había tres calles: la avenida Centenario (hoy Figueroa Alcorta), la avenida Río de la Plata (hoy Udaondo) y la ya mencionada Lidoro Quinteros. Un poco más allá estaba la avenida Blandengues (hoy Libertador) en donde había unas pocas casas. El resto del espacio no tenía demarcada las calles y estaba muy deshabitado. En el medio estaba la Empresa Argentina de Cemento Armado que durante los años 1936 a 1938 construyó el Monumental.

Foto aérea de la zona donde se ven las calles circundantes (1938).

La obras preliminares llevaron mucho tiempo porque hubo que poner en condiciones el terreno haciendo una correcta nivelación y además se trabajó arduamente para decidir qué tipo de fundaciones realizar para sostener el estadio, debido a que el lugar era un asentamiento inestable en el que emergían chorros de agua desde las napas subterráneas al hacer las excavaciones (podían provocar desmoronamientos imprevisibles). Problemas tremendamente complejos de solucionar porque que el Monumental fue construido casi sin maquinarias, en poco más de dos años, haciendo las bases de las columnas a mano, con palas, ya que no existían las excavadoras, extrayendo el agua de las napas subterráneas que inundaban las excavaciones con bombas de achique accionadas también a mano, transportando la tierra a lomo de burro en alforjas, y rellenando la zona del campo de juego y tribunas a mano, con primitivos elementos de trabajo. Una obra verdaderamente faraónica, como lo fue la construcción del antiguo Coliseo de Roma, cuyos planos fueron la base arquitectónica de nuestro Monumental.

Algunas fotos durante el periodo de construcción del estadio:









En plena construcción: Como se aprecia en la foto, se distinguen las tribunas Belgrano y San Martín.




Detalle de una revista (La Ingeniería) del año 1938 donde muestra entre sus páginas parte de la construcción del estadio como ser las armaduras y encofrados.






Ese 25 de mayo cerca de 8.000 personas presenciaron la entrega de una bandera Argentina y otra del club, costeadas por un grupo de asociados, y entonaron el Himno Nacional Argentino.

El gol de Peucelle, el primero en el Monumental, a los 31 minutos de juego, cuando Barullo recogió una cesión de Bernabé, se le fue a la marca del defensor Clulow con una corrida incontenible y venció al arquero Rivero con un remate bajo y cruzado. A los 21 minutos del segundo tiempo aumentó Bernabé Ferreyra (la jugada se inició en Vassini, siguió en Minella y concluyó con un violento disparo de La Fiera) y a los 27, Moreno gritó el tercer gol (centro de Peucelle y definición del Charro). Pasada la media hora, Young descontó para los uruguayos. En el palco oficial, y aunque en esto obviamente no hay ninguna precisión estadística, más de una lágrima le debe haber cruzado las mejillas a Liberti... El no era el presidente (el cargo estaba ocupado en ese momento por el doctor Julio Jorge Degrossi, otra columna trascendente en el proyecto), pero sí el aventurero incansable que había llegado a la nieta




La revista histórica River reflejaba los acontecimientos de la inauguración en sus páginas:





Durante años el estadio de Nuñez solo tuvo tres tribunas (lo que alanzo el crédito hipotecario) por lo que se lo conocía popularmente como “La Herradura”.



También, popularmente se decía, que la tribuna que da hacia el Rio de La Plata no se hacía para que los hermanos uruguayos puedan ver jugara a Walter Gómez.
En sus primeras décadas de existencia, el Monumental albergaba alrededor de 70 mil espectadores.
Esa cuarta tribuna se cerró con sus partes baja y media con el dinero de la venta de Enrique Omar Sivori a la Juventus de Italia en el año 1957 (10 millones de pesos de la época). Esto ocurrió bajo la presidencia de Enrique Pardo y fue la platea Colonia (luego Almirante Brown y actualmente Enrique O. Sivori).



El estadio fue elegido por el Ente Autárquico Mundial 1978 para ser una de la sedes del Mundial de Fútbol de ese año. Se realizaron remodelaciones al estadio con la construcción de la bandeja superior que faltaba a la Tribuna Almirante Brown, además de la colocación del cartel electrónico.

Imágen aportada por Expediente River

Otro hecho para destacar que durante las remodelaciones del año 1977 River Plate tuvo que alquilar cancha para jugar los torneos oficiales de primera y la elegida fue la del Club Huracán de Parque Patricios. River Plate fue campeón del Torneo metropolitano del año 1977 haciendo de local en esta condición.

El 29 de noviembre de 1986, tras cumplirse diez años del fallecimiento de Antonio Vespucio Liberti, el Monumental fue bautizado su nombre que hasta el día de hoy lo lleva.



AGRADECIMIENTOS A:


Por imágen aportada e información sobre el Estadio.

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